Para los no asiduos a las redes sociales, quizás la palabra instapoeta les suene rara o incluso les sugiera cosas como “poeta instantáneo”. Pues bien, este neologismo surge de la necesidad de definir a aquellas personas que escriben sus versos en la popular red social Instagram que gira alrededor de lo visual. En esta plataforma en la que se publican fotografías, con o sin filtro, editadas, acompañadas de hashtags, a veces incluso con pies de foto para informar de lo que se está viendo, la poesía ha encontrado su espacio.
¿Quiénes son los instapoetas?
Los llamados instapoetas regalan sus versos en Instagram y suelen acompañar sus creaciones con fotografías e ilustraciones. Cada vez son más – aunque algunos han alcanzado más éxito que otros – y a veces escriben en más de un idioma, de modo que también lo hacen en español.
El perfil del instapoeta responde a una persona joven, normalmente nativa digital y que empezó a publicar en la red a través de un blog personal. A partir de ahí, gracias a su habilidad en el uso de las nuevas tecnologías y de las redes sociales, los instapoetas publican sus entradas en internet.
La poesía vuelve a estar de moda
Esta nueva generación de poetas ha puesto de moda un género que siempre se ha considerado más bien minoritario. Sin embargo, entre los expertos hay opiniones para todos los gustos.
Hay quienes aseguran que se trata de “una nueva generación de poetas en sentido amplio de la palabra”, como Rosa Rodríguez Núñez, presidenta de la Asociación Española de Amigos de la Poesía (ASEAPO), que añade que “además de tener gran calidad literaria, están consiguiendo atraer a gente joven a través de recitales, redes y autoediciones”. Al contrario, el juicio de algunos catedráticos es que los instapoetas simplemente han sabido ver las posibilidades del entorno digital y han tenido suerte.
El móvil sustituye a la pluma
Las novedades de esta nueva forma de escribir poesía no se limitan solo al modo en que se publican los poemas. De ahí que los instapoetas, cuando se sienten inspirados o especialmente creativos ya no acuden al lápiz y al papel sino al móvil. Como explica Loreto Sesma en una entrevista: “Cuando me viene un poema a la mente, abro las notas del móvil y escribo la idea o los versos que se me han ocurrido en ese instante”.
Esta chica de 22 años que ya ha publicado cuatro poemarios, tiene miles de seguidores en Instagram, además de ser un referente en YouTube, plataforma en la que crea contenidos. Para Loreto todo empezó escribiendo poesías en un blog que veían solo sus amigos, hasta que navegando por internet descubrió el video poema Corazones, de Escandar Algeet, uno de los instapoetas más famosos entre los iniciadores de esta corriente.
Compartir el gusto por la poesía
En sus composiciones Irene X – pseudónimo de Irene Domingo Longares – trata temas de actualidad con un estilo directo y rebelde. Su deseo es el de hacer la poesía más accesible y tanto en su blog como en Instagram acompaña sus micropoemas con sugerentes imágenes.
Al igual que Loreto, Irene X comenzó su aventura como poeta a través de la red siendo una adolescente. Ávida lectora de poesía desde los 15, sintió la necesidad de ponerse a escribir poesía ella también. Y lo hizo bien: su primer libro de poesía fue todo un éxito y en la actualidad cuenta con seis poemarios, entre ellos La chica no olvida ganadora de un prestigioso certamen poético en 2018.
Seguidores vs. lectores
Según palabras de Marwan, un precursor y referente de esta nueva tendencia poética, la clave del éxito del fenómeno de los instapoetas estaría en que “han sabido transmitir una cierta cercanía”, sin olvidar que “hoy en día la gente pasa mucho tiempo en redes sociales y tiene como costumbre saltar de tuit en tuit o de publicación en publicación”.
También es cierto, sin embargo, que el fenómeno de la poesía en la red ha llevado a las editoriales tradicionales a interesarse por los instapoetas y prueba de ello es que muchos de ellos han sacado versiones en papel de sus poesías, algo que no deja de sorprender si se tiene en cuenta cómo surgió este movimiento literario.
